Cómo preparar a un niño para la llegada de un hermanito menor

Saber cómo preparar a un niño para la llegada de un hermanito menor es muy importante para mantener unida a la familia y evitar que el pequeño se sienta desamparado ante la aparición del nuevo miembro.

Para brindarte los mejores consejos, en Cucamenta hemos recurrido a una profesional. Se trata de Beatriz González, psicóloga en la clínica madrileña de psicología Somos Psicólogos.

Lo primero qué debes saber es que con el nacimiento de otro hijo pueden aparecer una serie de reacciones en la dinámica familiar que afecten al o a los hermanos mayores. Estas dependerán de su edad, su personalidad y las dinámicas familiares ya establecidas.

¿Qué emociones son comunes ante la llegada de un hermanito?

“La mezcla de emociones es común”, relata González, desde la emoción y la curiosidad hasta la inseguridad y los celos. “Algunos niños pueden mostrar entusiasmo y deseo de ayudar con el nuevo bebé, mientras que otros pueden sentirse desplazados o tener miedo a perder la atención de sus padres”, puntualiza.

En esta etapa también pueden aparecer los comportamientos regresivos, como volver a pedir el chupete, las rabietas o mojar la cama, así como una demanda de mayor atención. Las familias deben estar preparadas, “ofreciendo mucho amor, paciencia, y asegurando al niño su lugar en la familia (evitando que se sienta desplazado) y fomentando su participación en el cuidado del nuevo hermano/a para facilitar una transición más suave", nos cuenta Beatriz.

Consejos para adaptar al niño durante el embarazo

• “Es una oportunidad para que se adapte a los cambios, los comprenda y acepte”, señala la psicóloga, que aporta los siguientes consejos.
• Involucrar al niño: Es importante integrarlo, ayudando a que elija su ropa o juguetes, o a preparar su habitación.
• Hablar abiertamente de lo que está por venir: Explícale con palabras sencillas y adecuadas para su edad lo que le espera con la llegada del nuevo bebé. Puedes comprarle un libro o cuento adaptado a su edad o preguntarle sobre sus miedos y sentimientos.
• Visitar amigos o familiares con bebés: Así, se reducirá el factor sorpresa y el niño sabrá lo que está por venir.
• Crear expectativas realistas: El hijo/a mayor debe saber que los bebés requieren mucho cuidado y atención.“Se trata de explicar que no hay una pérdida de atención o amor hacia el hijo mayor, sino que durante un tiempo el nuevo bebé va a requerir más cuidados”
• Reforzar el papel de hermano mayor: “Esto es superimportante, ya que le da un papel protagonista”, explica González. “Habría que hablar sobre lo importante que será su rol como hermano mayor y cómo puede ser un buen modelo a seguir”, recomienda.
• Mantener rutinas: Le dará una gran sensación de estabilidad y seguridad. Debes evitando en la medida de lo posible que las rutinas cambien para que su día a día no se vea alterado.

Qué hacer ante las emociones fuertes o problemas de conducta

El niño puede experimentar incomprensión, enfado, ansiedad, celos, ira, tristeza o incomprensión tras el nacimiento del niño. “Es superimportante abordarlo con empatía y estrategias adecuadas, reconociendo y validando las emociones del niño”.

Cunado el niño lo está pasando mal, hazle saber que sus emociones importan y que es normal sentirse así, ofreciéndole atención individualizada y tiempo exclusivo en actividades que disfrute.

Para sentirse útil y fortalecer el vínculo entre hermanos, el niño puede involucrarse con tareas adaptadas a su edad en el cuidado de su hermanito. Seguir manteniendo las rutinas diarias constantes para darle seguridad y tener una comunicación abierta -escuchando activamente sin juzgar- son los otros pilares para que no se sienta inseguro.

Los padres deben potenciar los comportamientos positivos, mostrando cómo manejar las emociones de manera saludable y enseñando al niño a hacer lo mismo.

“Si los problemas de conducta o las emociones negativas persisten, habría que considerar consultar a un psicólogo infantil, ya que este puede proporcionar estrategias adicionales y apoyo tanto para el niño como para la familia”, destaca.

“En cualquier caso, es fundamental abordar esta situación con paciencia y amor, lo que ayudará al niño a adaptarse mejor a la nueva dinámica familiar y a desarrollar una relación positiva con su hermano menor”.